Buenos Aires, 07 octubre 2011 (11:21) | NOSIS
Moody's mejorará nota si Argentina normaliza deuda e INDEC
La agencia calificadora Moody's reiteró que no subirá la nota al país hasta tanto no solucione la falta de credibilidad de las mediciones que elabora el INDEC.
Gabriel Torres, analista soberano de la Argentina de la agencia, afirmó, en declaraciones formuladas en esta ciudad durante la conferencia anual de la firma: "Nadie negocia los salarios ni los alquileres en base a las mediciones oficiales", adelantando: "Cuando la gente confíe en la medición del Gobierno, reconsideraremos nuestra postura"; además, agregó, el Gobierno argentino "está pagando (por los bonos que ajustan por CER) menos de lo que debería porque el índice de inflación oficial es menor al real".
En la octava conferencia anual sobre las perspectivas para la región, Moody's justificó la decisión de no mejorar la nota que desde 2005 está en "B3" (sólo Ecuador en la región tiene peor calificación), seis escalones por debajo del grado de inversión en la "muy baja" calidad de las instituciones que lleva a que el riesgo de crisis sea "alto".
"El país tiene un buen nivel de actividad económica (crece más de lo que habíamos previsto), pero no hay previsibilidad en las políticas", sostuvo Torres, recordando: "Hace diez años, Brasil México y la Argentina tenían las mismas condiciones y calificación. Hoy están en escenarios totalmente distintos", pero hoy el país está en condiciones "muy parecidas a las de Venezuela".
Empero, el analista admitió que la Argentina está más cerca de que le suban la nota de que se la bajen. "Ya es muy baja y, para que se le baje aún más, debería estallar una crisis de una magnitud que no vemos que vaya a ocurrir", aclaró.
También la agencia pidió mejorar la relación con el FMI. "No entendemos por qué el Gobierno se resiste a tener una relación con el Fondo y no deja que éste haga un análisis como lo hace con el resto de las naciones", agregó, señalando que otros factores que traban una mejora son las deudas con el Club de París y los holdouts.
Frente a una recesión mundial, el analista sostuvo que la Argentina "no está blindada (...) El problema es que no se preparó para la mala época, que tarde o temprano llega. No ahorró en los momentos de bonanza ni mejoró sus condiciones para obtener deuda. Los capitales se van, las reservas caen y si se devalúa se acelera la inflación", agregó, aclarando que no se ve "un horizonte cercano de crisis como el que se vivió 2001".
En la misma reunión expuso el analista Mauro Leos, advirtiendo que se terminó el "viento de cola" y comenzó el "viento de frente" para la región, en un contexto global de mayor incertidumbre, volatilidad financiera y desaceleración económica, al menos en 2012.
De todas maneras, Torres matizó que "la crisis global impactará menos que en 2009", pero también señaló que el país tiene menos margen de maniobra que países vecinos por no contar con "un colchón fiscal como Chile".
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