Grecia se somete a nuevo y duro ajuste para seguir recibiendo fondos
El gobierno griego se resignó a adoptar medidas de austeridad suplementarias para 2011 y 2012, bajo la presión de sus acreedores, la UE y el FMI, con el objetivo de colmar los agujeros en sus cuentas públicas y alejar una cesación de pagos.
El Gobierno griego reducirá pensiones, extenderá un alza al impuesto a la propiedad y pondrá a decenas de miles de empleados públicos en preaviso de despido, como parte de un acuerdo para continuar recibiendo fondos de sus prestamistas internacionales, dijeron el miércoles funcionarios.
El Gabinete acordó recortar las pensiones que superan los 1.200 euros mensuales (1.642 dólares) en un 20 por ciento y, aseguró un funcionario de Gobierno con la condición de anonimato.
"Intentamos encontrar las medidas más justas posibles", aseguró el funcionario que asistió a la reunión de gabinete.
El Gobierno griego también extenderá hasta al menos el 2014 un alza de impuestos a los bienes raíces originalmente previsto para expirar el próximo año.
Además, pondrá a 30.000 empleados públicos en "reserva laboral" este año, aseguró el funcionario, lo que significa que reducirá sus pagos a un 60 por ciento de sus salarios y les dará 12 meses para encontrar un nuevo empleo en el mismo sector estatal o perderán sus trabajos.